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El clan Kardashian levanta pasiones allá donde va, pero este mismo amor de su público puede, a veces, convertirse en un arma de doble filo. Seguidores que pierden los papeles, acosadores, además de convertirse en objeto de secuestros y otros crímenes sólo por su fama son los riesgos de pertenecer a tan conocida familia. La matriarca del clan lo tiene claro y no ha dudado en firmar un multimillonario contrato con un agencia de seguridad para que vele por sus hijas.

Todo comenzó hace tan sólo unos días. Kendall Jenner volvía a casa, cuando se dio cuenta de que un coche la estaba persiguiendo. La modelo acabó llamando a la policía, que pudo detener a su acosador, un joven con cargos anteriores por acoso. Fue este suceso el que hizo saltar las alarmas de Kris, quien ha decidido que todas sus hijas deben llevar personal de seguridad con ellas.

Una decisión que su hija Kim ya tomó hace un tiempo. La celebrity y su marido Kanye West vivieron un incidente similar y desde entonces gastan nada más y nada menos que un millón de dólares en su seguridad. El miedo de la matriarca del clan Kardashian llegaría a tal punto que una vez llegó a tener una pistola para protegerse. Incluso les habría aconsejado a sus hijas que se hicieran con un arma y aprendieran a disparar para poder defenderse en caso de estar en peligro.  De momento Kris Jenner ya ha tomado cartas en el asunto y se piensa gastar varios millones de dólares en que sus hijas no corran ningún peligro. 

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